110 días en Nepal
Acabamos prácticamente de volver al pueblo después de 2 semanas de vacaciones en las que mis hermanos y mi novio han podido acompañarnos. Hemos visitado katmandu, Pokhara con trekking incluido por los al rededores y Bhaktapur. Recuerdo que el primer día que regresamos a katmandu para renovar el visado y comenzar nuestras vacaciones, me sentía un poco molesta por los comentarios que hacían mis compañeros: parecían tan contentos de haber dejado el pueblo! De comer otras cosas que no fueran dalbat! Sentía que de alguna manera estábamos traicionando el lugar donde habíamos estado viviendo los últimos meses. Sin embargo, es curioso como una persona se adapta muy poco a poco a una situación difícil y como rápidamente se puede acostumbrar a las comodidades. Y es que, después de dos semanas de duchas calientes y variedad culinaria, volver a Taluwa está siendo complicado: ratones en la habitación, mucho arroz, higiene mínima, caminatas,... Y la sensación de que esto ya ha terminado. Puede que ahora sea el momento más complicado que haya vivido aquí hasta ahora y pensar que vamos a pasar aquí las Navidades tampoco ayuda.
Pero bueno, todavía tenemos muchas cosas que hacer y nuevos proyectos y actividades que van surgiendo con lo que espero que la motivación vaya resurgiendo poco a poco de nuevo. Todo pasa y estoy segura de que en unos meses miraré atrás con mucha nostalgia por lo vivido así que ahora es el momento de aprovechar lo que nos queda.
